jueves, 4 de marzo de 2010

Oído al Parche

Lo reconozco. Lo mío puede resultar enfermizo en algún momento (o se puede pensar que tengo mucho tiempo libre). Una de esas "aficiones" que he adquirido con los años es la de reconocer, no por su propio nombre sino por el del personaje más característico que interpreta, a los dobladores españoles. No por el gran trabajo que hacen (que algunos sí, pero otros dejan mucho que desear), sino porque los hay que su personaje les crea una sombra tan alargada que apenas existen ellos como personas.

Uno de estos casos excepcionales es Ramón Langa (...alguna idea de quién estamos hablando?). Ramón Langa es un actor con más de 20 años de carrera a sus espaldas cuyo mayor éxito ha sido doblar al mismísimo Bruce Willis desde sus inicios. El problema es que uno es incapaz de separar la voz de Langa de la cara de Bruce Willis. Es más, uno es incapaz de concebir a Bruce Willis sin la voz de Ramón. Y si no me crees, a las pruebas me remito...



Durante todos estos años de ver cine doblado al español uno acaba reconociendo a personajes y sus voces y se plantea...qué pasaría si Mel Gibson y Richard Gere actuaran en la misma peli? (los dobla la misma persona desde siempre). Más voces reconocibles son las de los personajes de Friends, Chandler, Joey o Phoebe tienen unas voces que siempre se usan para voces de películas de comedia. Lisa Kudrow (Phoebe) es doblada por la misma dobladora que pone voz a Sandra Bullock.

Voces características como las de Woody Allen, House o Arnold Schwarzenegger hacen que nos tomemos cualquier peli más en serio. Es más... hacen que nos traguemos mejor las cuñas de radio.



El problema viene cuando espantajos de primer orden, gente de moda como Dani Martín de El Canto del Loco o Florentino Fernández en su versión El Informal se convierten en dobladores eventuales (ahí quedan pruebas como School of Rock, Martín doblando a Jack Black, o las secuelas de Austin Powers con chistes más de chiquito o el poli risitas que de la propia película).

Estas cagadas junto con doblajes de una calidad bajísima como las últimas versiones de Harry Potter, donde parece que hayan grabado el doblaje en una casa sin amueblar hacen que el espectador, al menos uno exigente como yo, no se meta en la historia y termine viendo las pelis en versión original.

2 comentarios:

  1. Tengo que decir que soy un acérrimo defensor de proyectar las peliculas en V.O. subtitulada por varios motivos. Por ejemplo:

    La V.O. subtitulada obliga al espectador a leer (cosa que hace mucha falta en esta sociedad) al mismo tiempo que el oido está trabajando, por lo que se está asociando de forma casi inconsciente un idioma a otro y reforzando el no nativo (aunque nos parezca que no entendemos nada de lo que oimos).

    Además, actuar no sólo implica gesticular y poner caras según la situación, la modulación de la voz e interpretación del texto son fundamentales como para ser sustituidas (no es lo mismo escuchar un poema leido por la persona que lo ha escrito que por un lector cualquiera).

    Con este parrafaco no pretendo negar que haya dobladores de gran calidad en nuestro país, sólo critico el doblaje en si. Y por supuesto, lo más esperpéntico de todo, como tú comentas, es cuando el doblaje viene a cargo de algún "figura" como Dani Martín.

    En definitiva, gracias tito Franco por joder la marrana durante tanto tiempo, pero quiero más cines que proyecten en V.O. YAA!

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  2. Veo que cada vez somos más lo que defendemos la versión original subtitulada. ¡Genial!


    Lo de llamar "figura" al pendejo ese... ha sido muy grande :-P

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